THINKING OUTSIDE THE BOX
Cada día me enteraba de nuevos usos de mis tarjetas, pero seguía sin conseguir clientes.
Somos una especie de cebra que divaga entre el cambio hacia lo desconocido y el retorno hacia lo mismo. La metamorfosis de nuestro ser trae el blanco-negro tatuado en la piel, la búsqueda y el desacierto de la mortalidad. Y a pesar de presentirlo, confiamos en sobrevivir después del amanecer gracias a la pasión derramada en el eros y a la congénita locura de desarmar cada día bajo el signo del porvenir, de lo que será.
Nicolás hace su máximo esfuerzo. El brazo no responde y el contrabajo se desangra bajo sus pies. Hoy no hay posibilidad de contrapunto ni de jam, sólo los grises de sus demonios habitando y desnudando los márgenes de la realidad. Encontrar otra dosis de escape ya no le importa, tampoco es posible. Nicolás intuye posible búsqueda en otro cuerpo en otro tiempo, no sabe si pasado o futuro. El "Gitano" Nicolás huye otra vez del club, aunque sabe que nunca volvió, que eso fue sólo un espejismo, la resaca del no ser luego de habitar y desgastar impúdicamente el ser.
Retrasada, estás ya muy retrasada, lo estás porque en el fondo no te interesa compartir con los mismos de siempre, con sus diálogos superficiales, con sus monólogos grandilocuentes, por eso llegas tarde al compromiso.
Thelonious bebe leche al amparo de la habitación que compartimos. Debe ser por aquello de “las siete vidas” que parece nunca tener prisa, siempre está como relamiendo el minuto anterior, taciturno, tranquilo, equilibrado, muy diferente a lo que siento yo en esta hora de cíclico ocaso. Debe ser por ello que nos llevamos bien. Uno a cada lado de la habitación, en cada extremo del continuo que se desconoce, pero que se intuye a cada momento, en cada gesticulación dual. Esta es una noche especialmente fría. Prometo mañana conseguir una estufa o a lo menos cortinas gruesas u otra frazada para el lecho que compartimos cada noche cuando el cansancio me aturde y olvido las ganas de escapar, de volver a refugiarme en el bosque nativo, entre líquenes y savia acumulada como lágrimas. Thelonious juega con una bola de papel hecha con la última cuenta del agua que llegó hace un par de meses, creo que todavía no intuye mi cuasi ausencia.